El hostal Villa de Brihuega está diseñado para descansar y desconectar de la rutina en un entorno único. Tras visitar Brihuega, La ALcarria o sus exclusivos campos de lavanda, llegar al hostal no es más que prolongar el placer de la experiencia.

Cuenta con 30 habitaciones, todas con baño privado, calefacción y aire acondicionado. Cinco de ellas abuhardilladas, con techos de madera que les confieren un encanto muy especial. La decoración busca transmitir la calma y el relax que se busca y se percibe en el pueblo. Un espacio para descansar y relajarse.  Sin olvidar la gastronomía que en el propio restaurante del hostal, con su bonita y acogedora decoración, se puede degustar.

El viajero encontrará en el hostal Villa de Brihuega, ese lugar de reposo que desde hace décadas han disfrutado otros viajero en este mismo edificio; tantos años después, inicia una nueva etapa como «casa de viajeros y comidas»